El
Lazio derrota a la Roma
con un golazo de Klose en el minuto 92.
Los coches romanos amanecías
helados, el frío ya bajaba de las montañas turinesas y, mientras tanto, las
manifestaciones seguían su curso sobre las calles que, desiertas, dejaban paso
a un derbi tan esperado como temido. Los carabineros, porra y pistola en mano
se orientaban por toda la ciudad en un esfuerzo titánico por evitar los
enfrentamientos entre los tifosi de ambos equipos. Las horas pasaban y no por
ello la incertidumbre. Los ultras laziales
destrozaron un coche en la fontana di
Trevi. Poco más tarde, la pelota rodaba por el Olímpico y el espectáculo
empezaba. Los mosaicos desplegados en ambos fondos aportaban color al partido
y, cuando la gente se acomodaba aún es sus butacas, Osvaldo adelantó a los de
Luis Enrique. Pero el equipo de un Edy Reja que llegaba al partido con la
obligación de ganar su primer enfrentamiento contra los romanistas en dos años
y medio, no se rindió; desplegó un buen juego con un espectacular Hernanes, un
brasileño atípico que se encuentra feliz en el centro del campo renunciando a
su banda izquierda habitual. Al terminar la primera parte, Lucho hizo unos cambios estratégicos tratando de encontrar la
sentencia a un duro partido. Pero el técnico se equivocó como nunca antes lo
había hecho, pese a que ya hubiera errado al confeccionar el 11 titular en el
que 9 futbolistas eran debutantes en esta clase de encuentros.
La segunda parte ya fue un
monólogo de los celestes; Simon Kjaer, defensa danés que fue fichado en verano,
derribó a Brochi en una internada del capitán en el área. El defensor vio la
cartulina roja directa y ahí terminó el partido para el Roma.
Tan solo el gran portero que
tienen, llamado Sketelemburg y que fue el gran protagonista del mundial junto
con Casillas sacaba algo positivo del estadio Olímpico. Ahí empezaron las
trifulcas entre aficionados en las que los locales vencieron dejando claro que
la cultura de los aficionados italianos está a años luz de la de los españoles
bajo el lema “nosotros somos baluartes del ser, vosotros símbolos del
aparentar”.
Más tarde, ya en el minuto 93,
una buena jugada de Lulic acabó con el balón en los pies de Klose. Este no se
lo pensó dos veces y batió a la
Roma.
Ahora, los azulones están a un
punto del líder, la Juventus
pero, quien sabe si no será este su año y volverán a triunfar. Mientras tanto,
los romanos, sin color ni ideas se pasean por la mediocridad de la liga más
mediocre de Europa.
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