- El grupo de informáticos revela información de Wert y Ángeles González Sinde.
- Aquí comienza la venganza de los hackers en España.
La guerra ha comenzado. Y no era esa de croatas y serbios que nos imaginábamos, ni una nuclear entre EE.UU e Irán. La guerra ha comenzado y, el arma más utilizada es el ordenador. Ese instrumento capaz de lograr todo salvo la inmortalidad y que puede hacer mucho daño. Eso lo saben muy bien los anonymous, un grupo de informáticos que se revelan contra lo establecido y desafían al FBI día tras día.
Muchos los tachan de vándalos delincuentes, y otros, les alaban por sus actos, pero, en este tiempo que vivimos, lo único cierto es que generan controversia.
Tras el cierre de magaupload, se inició el movimiento de la manera más fuerte, la censura de los censuradores. Se trata del marzo negro, que consiste en no comprar nada cultural, ni un disco, ni un libro, ni ver películas, tanto de vídeo -compradas en ese mes- como en el cine. El mes que han elegido es en el que se hacen públicos todos los datos de pérdidas y beneficios, el primer mes de 2012 para la industria audiovisual.
Lo cierto es que, en caso de que la iniciativa madurase, sería un duro golpe para los gobiernos, que esperan esas fechas como agua de marzo.
Pero no sólo se plantearon hipótesis de lo que podía suceder dentro de dos meses, también pasaron a la acción con una medida provocativa y dolorosa para esos hombres públicos, que viven de una imagen falsa que dan al mundo, revelar sus datos personales.
La primera víctima fue el jefe del FBI, que sufrió en internet los estragos de un colectivo que pide, a gritos, venganza.
El segundo asalto ha sido aquí en España, en una protesta contra la conocida, temida y odiada ley Sinde, que quiere continuar Wert y que condena la piratería en la web. Precisamente, uno de los eslóganes de la asociación es "tú lo llamas piratería, nosotros, lo llamamos libertad". Ambos tuvieron el mismo castigo que el pez gordo de la policía más "admirada" del mundo, sus datos se expanden por los buscadores.
Armados con sus chips, y sus sistemas operativos que, para el común de los mortales es otro idioma, uno ilegible e inentendible, y unas máscaras como "V", el protagonista del film "V de Vendetta", son el terror para los estados, y la salvación para los internautas.
El pulso sigue, pero algún día tendrá que parar y nadie sabe cuándo acabará, quién ganará, pero por el mundo hay unos informáticos que están tirando demasiado fuerte.
Videos oficiales de Anonymous.
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