Intocable, entre el humor y la emoción

• La película francesa "Intocable", analizada.
• El film mezcla el humor y la emoción con unas brillantes transiciones entre escenas.

La película "Intocable" puede parecer, a priori una película comercial, que intenta forzar la risa del público y no busca la calidad, pero cuando esta es vista, uno se da cuenta de que se pueden juntar las carcajadas con el séptimo arte en estado puro. 
 

La película, con una trama que es buena de por sí, un joven negro que ha sido delincuente y que, en una búsqueda por empleos denegados, para volver a cobrar el paro, acaba en la casa de un tetraplégico, en una entrevista de trabajo para cuidarle las 24 horas.




Sin embargo, contra todo pronóstico, el enfermo le contrata a modo de prueba durante un mes.




Así, se desarrolla una amistad única, que concluye con unas escenas emotivas.
Pero no todo son llantos en el largometraje, también prima la risa, con chistes ocurrentes e irónicos, la película consigue que la sala se caiga cada diez minutos, chiste tras chiste.


En ningún momento te das cuenta de que estás viendo una producción francesa, ya que deja la tradición atrás y las tomas, en lugar de durar años, transcurren rápidamente, dándole ritmo y emoción a cada momento.


Hay que destacar el papel de los actores, que consiguen meterse en la carne del personaje de manera única.


En definitiva, los llantos y la risa pueden ir de la mano, y más si eres un intocable.