- Un partido político bávaro plantea un gobierno virtual en el que participen activamente los ciudadanos.
- Las ventajas e inconvenientes, a análisis.
Todos recordamos las imágenes de hace dos años, cuando la plaza de Sol se llenó de jóvenes, y poco a poco se le fueron sumando personas de todas las edades, para protestar contra el sistema político.
Investigando más a fondo y con la ayuda de los medios de comunicación se distribuyeron algunas de las ideas que la organización tenía para mejorar la situación actual.
Así, decidieron que, ya que, al fin y al cabo, un país es sostenido por sus ciudadanos, que sean ellos los que decidan las medidas que hay que tomar para llevar a un lado o a otro la economía, educación o sanidad del país.
Todas estas propuestas fueron llevadas a Alemania, donde surgió el Partido X, que se basa en el anonimato de todos su afiliados y busca eliminar del panorama político a los senadores y diputados del parlamento.
Sin ganase las próximas elecciones, todo lo que a Alemania incumbiese se decidiría mediante referéndums y encuestas a la población, así como debates en los que la mayoría absoluta no importase tanto.
A primera vista, es un gran proyecto, bastante ilusionante y que, para algunos, sería la solución definitiva a todos los problemas que hay ahora en Europa o en el esto del mundo.
El wikigobierno, como ellos mismos llaman a su ideología, se basa en la cercanía virtual y la opinión a través de internet. De ahí surge el primero de los fallos que, en mi opinión, tiene esta propuesta.
Los ancianos, algunas de las personas más sabias de un país y que han formado parte de todos los momentos de transición, no suelen tener acceso a las redes sociales y, por tanto, su opinión no sería tan relevante.
El segundo, y más importante, es la falta de un líder claro, ya que alguien tiene que hacerse cargo de transmitir a la gente todas estas ideas de una forma más concisa, más clara.
La oscuridad está bien, aunque hay que tener en cuenta que, a veces, no te deja ver, y eso es uno de los fallos que tiene un partido político que esconde a sus integrantes de entrevistas y rehúsa de publicitarse de algún modo.
El último error que cometen es el de dejar toda la capacidad de elección en manos de la población ya que, siempre es bueno contar con la opinión de expertos, y de gente algo más formada para tomar la decisión idónea.
Soluciones para unos, ilusiones para otros. ¿Creen que el Partido X llegará a ser una realidad consolidada?
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